jueves, 31 de agosto de 2023

Estén preparados

¡Amor y paz!

Los invito, hermanos, a leer y meditar la Palabra de Dios, en este jueves de la XXI Semana del Tiempo Ordinario, ciclo A.

 

Dios nos bendice...

 

PRIMERA LECTURA

 

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo

a los cristianos de Tesalónica       3, 7-13

 

Hermanos, a pesar de las angustias y contrariedades, nos sentimos reconfortados por ustedes, al comprobar su fe. Sí, ahora volvemos a vivir, sabiendo que ustedes permanecen firmes en el Señor. ¿Cómo podremos dar gracias a Dios por ustedes, por todo el gozo que nos hacen sentir en la presencia de nuestro Dios? Día y noche, le pedimos con insistencia que podamos verlos de nuevo personalmente, para completar lo que todavía falta a su fe.

Que el mismo Dios, nuestro Padre, y nuestro Señor Jesucristo, nos allanen el camino para ir allí. Que el Señor los haga crecer cada vez más en el amor mutuo y hacia todos los demás, semejante al que nosotros tenemos por ustedes. Que él fortalezca sus corazones en la santidad y los haga irreprochables delante de Dios, nuestro Padre, el día de la Venida del Señor Jesús con todos sus santos.

 

Palabra de Dios.

 

SALMO         

 

Sal 89, 3-4. 12-13. 14 y 17 (R.: 14)

 

R.        Señor, sácianos con tu amor, y cantaremos felices.

 

Tú haces que los hombres vuelvan al polvo,

con sólo decirles: «Vuelvan, seres humanos.»

Porque mil años son ante tus ojos

como el día de ayer, que ya pasó,

como una vigilia de la noche.  R.

 

Enséñanos a calcular nuestros años,

para que nuestro corazón alcance la sabiduría.

¡Vuélvete, Señor! ¿Hasta cuándo…?

Ten compasión de tus servidores.  R.

 

Sácianos en seguida con tu amor,

y cantaremos felices toda nuestra vida.

Que descienda hasta nosotros la bondad del Señor;

que el Señor, nuestro Dios,

haga prosperar la obra de nuestras manos.  R.

 

EVANGELIO

 

Lectura del santo Evangelio según san Mateo   24, 42-51

 

Estén prevenidos, porque ustedes no saben qué día vendrá su Señor. Entiéndanlo bien: si el dueño de casa supiera a qué hora de la noche va a llegar el ladrón, velaría y no dejaría perforar las paredes de su casa. Ustedes también estén preparados, porque el Hijo del hombre vendrá a la hora menos pensada.

¿Cuál es, entonces, el servidor fiel y previsor, a quien el Señor ha puesto al frente de su personal, para distribuir el alimento en el momento oportuno? Feliz aquel servidor a quien su señor, al llegar, encuentre ocupado en este trabajo. Les aseguro que lo hará administrador de todos sus bienes. Pero si es un mal servidor, que piensa: «Mi señor tardará», y se dedica a golpear a sus compañeros, a comer y a beber con los borrachos, su señor llegará el día y la hora menos pensada, y lo castigará. Entonces él correrá la misma suerte que los hipócritas. Allí habrá llanto y rechinar de dientes.

 

Palabra del Señor.

 

PARA REFLEXIONAR

  • Estamos en el año 51 y Pablo está lejos de Tesalónica. Teme las consecuencias de las falsas predicaciones y de las persecuciones que sufren los cristianos. Concluye la primera parte de su carta a los tesalonicenses con una oración, pidiendo a Dios la alegría de volver a ver a los suyos para hacerlos progresar en la fe.
  • La principal preocupación del fundador de la comunidad parece ser las virtudes teologales, fundamento de la vida del cristiano.
  • Pablo había debido abandonar Tesalónica sin haber podido acabar la catequesis necesaria. La fe de la comunidad es frágil y el informe de Timoteo,  probablemente le ha revelado sus lagunas.
  • El apóstol estima en efecto, que él es responsable del amor que los tesalonicenses se testimonian mutuamente, ya que este amor es reflejo del que él les ha testimoniado.
  • Pablo descubre el contexto de su vida de apóstol: vive «en medio de congojas y tribulaciones». Esta fuerza, esta perseverancia que, a pesar de los obstáculos, experimentan los que tienen fe, no proviene de sí mismos, es una fuerza «en el Señor».

***

  • Hay que estar siempre preparados. Jesús en el evangelio de hoy nos habla de la incertidumbre del momento en que vendrá el Señor. Si queremos que nos encuentre velando en el momento de su llegada, no nos podemos distraer, ni quedarnos dormidos.
  • Jesús conoce perfectamente la tendencia que tenemos a dejarnos envolver en las preocupaciones y búsquedas cotidianas, a tal punto que muchas veces terminamos sucumbiendo ante ellas. Las distracciones, los trabajos y los compromisos sociales toman completamente nuestra conciencia humana y terminamos por no descubrir lo que pasa en nuestro entorno.
  • Cada día, cada hora, en cada instante, el Señor está cerca de nuestra vida. A través de las llamadas de nuestro corazón, a través de las personas que nos rodean, de los hechos que se van sucediendo, de los sufrimientos y necesidades del mundo, el Señor llama a nuestra puerta.
  • Necesitamos estar atentos a la novedad que irrumpe y discernirla cristianamente para poder responder. La vida cristiana no es un reposo, sino una atenta vigilia en el amor y la conversión hecha cálido servicio en la comunidad, y desde allí a toda la humanidad.

 

PARA DISCERNIR

  • ¿Experimento las llamadas de Dios en la vida cotidiana?
  • ¿Hay hechos que me resultan intrascendentes?
  • ¿En qué acontecimientos experimento de un modo especial la llegada del Señor?

 

REPITAMOS A LO LARGO DE ESTE DÍA

 

Espero en ti Señor

 

ARZOBISPADO DE BUENOS AIRES

Vicaría de Pastoral

miércoles, 30 de agosto de 2023

«¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas!»

¡Amor y paz!

 

Los invito, hermanos, a leer y meditar la Palabra de Dios y el comentario, en este miércoles de la semana 21ª del Tiempo Ordinario, ciclo A.

 

Dios nos bendice...

 

Primera lectura

 

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses (2,9-13):

Recordad, hermanos, nuestros esfuerzos y fatigas; trabajando día y noche para no serle gravoso a nadie, proclamamos entre vosotros el Evangelio de Dios. Vosotros sois testigos, y Dios también, de lo leal, recto e irreprochable que fue nuestro proceder con vosotros, los creyentes; sabéis perfectamente que tratamos con cada uno de vosotros personalmente, como un padre con sus hijos, animándoos con tono suave y enérgico a vivir como se merece Dios, que os ha llamado a su reino y gloria. Ésa es la razón por la que no cesarnos de dar gracias a Dios, porque al recibir la palabra de Dios, que os predicamos, la acogisteis no como palabra de hombre, sino, cual es en verdad, como palabra de Dios, que permanece operante en vosotros, los creyentes.

Palabra de Dios

 

Salmo

 

Sal 138,7-8.9-10.11-12ab

R/.
Señor, tú me sondeas y me conoces

¿Adónde iré lejos de tu aliento,
adónde escaparé de tu mirada?
Si escalo el cielo, allí estás tú;
si me acuesto en el abismo, allí te encuentro. R/.

Si vuelo hasta el margen de la aurora,
si emigro hasta el confín del mar,
allí me alcanzará tu izquierda,
me agarrará tu derecha. R/.

Si digo: «Que al menos la tiniebla me encubra,
que la luz se haga noche en torno a mí»,
ni la tiniebla es oscura para ti,
la noche es clara como el día. R/.

 

Evangelio de hoy

 

Lectura del santo evangelio según san Mateo (23,27-32):

En aquel tiempo, habló Jesús diciendo: «¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que os parecéis a los sepulcros encalados! Por fuera tienen buena apariencia, pero por dentro están llenos de huesos y podredumbre; lo mismo vosotros: por fuera parecéis justos, pero por dentro estáis repletos de hipocresía y crímenes. ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que edificáis sepulcros a los profetas y ornamentáis los mausoleos de los justos, diciendo: "Si hubiéramos vivido en tiempo de nuestros padres, no habríamos sido cómplices suyos en el asesinato de los profetas"! Con esto atestiguáis en contra vuestra, que sois hijos de los que asesinaron a los profetas. ¡Colmad también vosotros la medida de vuestros padres!»

Palabra del Señor

 

Reflexión

 

Hay personas para las que el cuidado de su propia imagen es algo muy importante. Algunos dedican a ello gran parte de su energía. En principio, no está mal. Lo malo viene cuando la imagen, la apariencia, no coincide con la realidad de la persona. Es entonces cuando el cuidado de la imagen deviene hipocresía. Cuando las personas se convierten en sepulcros blanqueados. Y se empieza a vivir una doble vida. La real y la aparente. Lo malo es que hace falta consumir muchísima energía para vivir de esa manera durante largo tiempo. Y ciertamente también hace falta la colaboración y complicidad de otras personas. Terminan colaborando porque al proteger la apariencia del otro se sienten ellas mismas protegidas. Más hipocresía.

 

Jesús denuncia esta hipocresía en los letrados y fariseos. Son los que dictan las normas, los que dicen a los demás cómo tienen que comportarse, siempre en el nombre de Dios, siempre diciendo que sus normas y leyes son la voluntad de Dios. Pero ellos saben lo suficiente como para encontrar otros caminos, excusas varias, para no cumplir sus mismas normas. Jesús denuncia y condena con radicalidad. Porque está a favor de los sencillos, de los humildes, a los que aquellos tenían que haber cuidado y que, sin embargo, lo que reciben son condenas y admoniciones por no cumplir las normas como ellos dicen.

 

Casi seguro que no todos los letrados y fariseos eran como Jesús dice en sus palabras. Pero es muy posible que callaran y no denunciaran a esos letrados y fariseos hipócritas para no dañar a la institución a la que ellos mismos pertenecían o para no meterse en problemas. Y haciendo eso eran cómplices de la hipocresía de los otros.

Nos podemos preguntar si hay fariseos y letrados como los del Evangelio en la Iglesia actual. Pero también nos podemos preguntar cuantas veces callamos ante el mal que hacen otros simplemente para proteger nuestra propia imagen, para vivir tranquilos y seguros. No sé si Jesús lo aprobaría.  

 

Fernando Torres cmf

Ciudad Redonda


martes, 29 de agosto de 2023

Juan era un hombre justo y santo

¡Amor y paz!

 

Los invito, hermanos, a leer y meditar la Palabra de Dios, en este martes XXI del T.O., cuando celebramos la memoria del Martirio de San Juan Bautista.

 

Dios nos bendice...

 

PRIMERA LECTURA

 

Lectura del profeta Jeremías  1, 17-19

Tú, ahora, muévete y anda a decirles todo lo que yo te mande. No temas enfrentarlos, porque yo también podría asustarte delante de ellos. Este día hago de ti una fortaleza, un pilar de hierro y una muralla de bronce frente a la nación entera: frente a los reyes de Judá y a sus ministros, frente a los sacerdotes y a los propietarios.

Ellos te declararán la guerra, pero no podrán vencerte, pues yo estoy contigo para ampararte -palabra de Yahvé-.»


Palabra de Dios


SALMO         

 

Sal 70,1-7

 

R: Mi boca contará tu auxilio

 

En ti, Señor, confío,
que no me decepcione.
En tu justicia tú querrás defenderme,
inclina a mí tu oído y sálvame. R.

Sé para mí una roca de refugio,
una ciudad fortificada en que me salve,
pues tú eres mi roca, mi fortaleza. R.


Líbrame, oh Dios, de la mano del impío,
de las garras del malvado y del violento,
pues tú eres, Señor, mi esperanza,
y en ti he confiado desde mi juventud. R.

En ti me apoyé desde mis primeros pasos,
tú me atrajiste desde el seno de mi madre,
y para ti va siempre mi alabanza.
Pero ahora para muchos soy un escándalo,
y sólo me quedas tú, mi amparo seguro. R.

EVANGELIO

 

Lectura del santo Evangelio según san Marcos          6, 17-29

 

En efecto, Herodes había mandado tomar preso a Juan y lo había encadenado en la cárcel por el asunto de Herodías, mujer de su hermano Filipo, con la que se había casado. Pues Juan le decía: «No te está permitido tener a la mujer de tu hermano.» Herodías lo odiaba y quería matarlo, pero no podía, pues Herodes veía que Juan era un hombre justo y santo, y le tenía respeto. Por eso lo protegía, y lo escuchaba con gusto, aunque quedaba muy perplejo al oírlo.

Herodías tuvo su oportunidad cuando Herodes, el día de su cumpleaños, dio un banquete a sus nobles, a sus oficiales y a los personajes principales de Galilea. En esa ocasión entró la hija de Herodías, bailó y gustó mucho a Herodes y a sus invitados. Entonces el rey dijo a la muchacha: «Pídeme lo que quieras y te lo daré.» Y le prometió con juramento: «Te daré lo que me pidas, aunque sea la mitad de mi reino.» Salió ella a consultar a su madre: « ¿Qué pido?» La madre le respondió: «La cabeza de Juan el Bautista.» Inmediatamente corrió a donde estaba el rey y le dijo: «Quiero que ahora mismo me des la cabeza de Juan el Bautista en una bandeja.»

El rey se sintió muy molesto, pero no quiso negárselo, porque se había comprometido con juramento delante de los invitados. Ordenó, pues, a un verdugo que le trajera la cabeza de Juan. Este fue a la cárcel y le cortó la cabeza. Luego, trayéndola en una bandeja, se la entregó a la muchacha y ésta se la pasó a su madre. Cuando la noticia llegó a los discípulos de Juan, vinieron a recoger el cuerpo y lo enterraron.

 

Palabra del Señor

 

PARA REFLEXIONAR

  • Hacemos memoria del martirio de san Juan Bautista, el Precursor de Jesús. Toda la vida del Bautista gira en torno a la persona del Salvador, de manera que en torno a Él, la existencia y la tarea del Precursor cobran sentido.
  • Desde las entrañas de su madre, siente la proximidad del Salvador. El abrazo de María y de Isabel, dos futuras madres, abre el diálogo entre el que prepara el camino y Aquel que es el mismo camino. El Salvador santifica a Juan, y éste salta de gozo dentro del vientre de su madre. En su misión de Precursor mantuvo este entusiasmo —que etimológicamente significa “estar lleno de Dios”—, le preparó los caminos, le allanó las rutas, le rebajó las cimas, lo anunció ya presente, y lo señaló como el Mesías: «He ahí el Cordero de Dios» (Jn 1,36).
  • El trabajo de Juan Bautista continúa la línea de los antiguos profetas de Israel, que denunciaban los pecados sociales y anunciaban a su pueblo el tiempo de la presencia de Dios, que los haría salir del oprobio y de la crisis. Es difícil el destino de los profetas. Ser profeta, dice Guardini, significa decir a su tiempo contra su tiempo, lo que Dios manda decir. —No te es licito tener como esposa a Herodias, la mujer de tu hermano, le grita Juan a Herodes Antipas. Y Juan lo paga en la cárcel de Maqueronte.
  • Su muerte confirmó la veracidad de su misión, ya que murió asesinado en el palacio del rey y siendo cómplices los que oprimían el país con su lujo, riqueza y escándalos. Su muerte testimonial es una clave importante para comprender el martirio de Jesús. Fue su Precursor en la vida, y también le precede ahora en la muerte cruel. Juan ha cumplido ya su misión. El misterio de la Cruz de Jesús está ya presente en este martirio. Su sangre no será inútil. «La cabeza de Juan Bautista predica mejor desde la bandeja que sobre sus hombros».
  • La memoria de los mártires o «testigos» ha sido siempre clave e importante para la vida de la iglesia cristiana. El cristianismo no puede ser entendido, sino como un testimonio fuerte y vivo, del nuevo mundo que irrumpe en la historia en la persona de Jesús de Nazaret. El seguimiento de Cristo no es posible si no estamos dispuestos a asumir la cruz, que significa oponerse a las estructuras de pecado existentes en el mundo y la historia.
  • Que la fiesta del Martirio de san Juan Bautista sea una invitación para que nuestra vida también gire en torno a la persona de Jesús, lo cual le dará su pleno sentido, y que su ejemplo “nos entusiasme”, para que llenos de Dios, también demos testimonio de nuestra fe en Jesús con valentía.
  • «Está encerrado, en la tiniebla de una mazmorra, aquel que había venido a dar testimonio de la Luz, y había merecido de la boca del mismo Cristo (…) ser denominado “antorcha ardiente y luminosa”. Fue bautizado con su propia sangre aquél a quien antes le fue concedido bautizar al Redentor del mundo». San Beda.

 

PARA DISCERNIR

  • ¿Qué lugar ocupa la defensa de la verdad en mi opción de fe?
  • ¿Hasta dónde arriesgo por defender lo que es justo?
  • ¿Acomodo la realidad a mi conveniencia?

 

REPITAMOS A LO LARGO DE ESTE DÍA

 

Señor, mi destino está en tus manos

 

ARZOBISPADO DE BUENOS AIRES

Vicaría de Pastoral

 

 

 

lunes, 28 de agosto de 2023

Ay de los que cierran a los hombres el Reino

¡Amor y paz!

 

Los invito, hermanos, a leer y meditar la Palabra de Dios y el comentario, en este lunes de la XXI Semana del Tiempo Ordinario, ciclo A.

 

Dios nos bendice...

 

PRIMERA LECTURA

 

Principio de la primera carta del apóstol san Pablo

a los cristianos de Tesalónica       1, 1-10

 

Pablo, Silvano y Timoteo saludan a la Iglesia de Tesalónica, que está unida a Dios Padre y al Señor Jesucristo. Llegue a ustedes la gracia y la paz.

Siempre damos gracias a Dios por todos ustedes, cuando los recordamos en nuestras oraciones, y sin cesar tenemos presente delante de Dios, nuestro Padre, cómo ustedes han manifestado su fe con obras, su amor con fatigas y su esperanza en nuestro Señor Jesucristo con una firme constancia.

Sabemos, hermanos amados por Dios, que ustedes han sido elegidos. Porque la Buena Noticia que les hemos anunciado llegó hasta ustedes, no solamente con palabras, sino acompañada de poder, de la acción del Espíritu Santo y de toda clase de dones. Ya saben cómo procedimos cuando estuvimos allí al servicio de ustedes.

En todas partes se ha difundido la fe que ustedes tienen en Dios, de manera que no es necesario hablar de esto. Ellos mismos cuentan cómo ustedes me han recibido y cómo se convirtieron a Dios, abandonando los ídolos para servir al Dios vivo y verdadero, y esperar a su Hijo, que vendrá desde el cielo: Jesús, a quien él resucitó y que nos libra de la ira venidera.

 

Palabra de Dios.

 

SALMO         

 

Sal 149, 1-2. 3-4. 5-6a y 9b (R.: 4a)

 

R.       El Señor tiene predilección por su pueblo.

 

Canten al Señor un canto nuevo,

resuene su alabanza en la asamblea de los fieles;

que Israel se alegre por su Creador

y los hijos de Sión se regocijen por su Rey.  R.

 

Celebren su Nombre con danzas,

cántenle con el tambor y la cítara,

porque el Señor tiene predilección por su pueblo

y corona con el triunfo a los humildes.  R.

 

Que los fieles se alegren por su gloria

y canten jubilosos en sus fiestas.

Glorifiquen a Dios con sus gargantas

ésta es la victoria de todos tus fieles.  R.

 

EVANGELIO

Lectura del santo Evangelio según san Mateo 23, 13-22

 

« ¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que cierran a los hombres el Reino de los Cielos! Ni entran ustedes, ni dejan entrar a los que quisieran.

¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que recorren mar y tierra para conseguir un prosélito, y cuando lo han conseguido lo hacen dos veces más digno de la Gehena que ustedes!

¡Ay de ustedes, guías ciegos, que dicen: «Si se jura por el santuario, el juramento no vale; pero si se jura por el oro del santuario, entonces sí que vale»! ¡Insensatos y ciegos! ¿Qué es más importante: el oro o el santuario que hace sagrado el oro? Ustedes dicen también: «Si se jura por el altar, el juramento no vale, pero vale si se jura por la ofrenda que está sobre el altar.» ¡Ciegos! ¿Qué es más importante, la ofrenda o el altar que hace sagrada esa ofrenda?

Ahora bien, jurar por el altar, es jurar por él y por todo lo que está sobre él. Jurar por el santuario, es jurar por él y por aquel que lo habita.

Jurar por el cielo, es jurar por el trono de Dios y por aquel que está sentado en él.»

 

Palabra del Señor.

 

PARA REFLEXIONAR

  • Tesalónica era la capital de Macedonia, al norte de Grecia. Las dos cartas de san Pablo a los Tesalonicenses son las primeras epístolas escritas por él, hacia el año 51 y al mismo tiempo los primeros textos del Nuevo Testamento.
  • Obligado a huir, a causa de la persecución, Pablo dejó allí una pequeña comunidad cristiana muy frágil que llevaba de vida sólo unos meses. Habiendo enviado a Timoteo para tener noticias, Pablo se entera de que los cristianos perseveran con firmeza y les envía una carta para felicitarlos y contestar a algunas preguntas.
  • La persecución y la perseverancia son para Pablo una prueba del justo juicio de Dios, que quiere hacerlos dignos de su reino.

***

  • Los ataques de Jesús contra los fariseos van a continuar durante tres días, con una serie de lamentaciones que les descalifican comenzando con la formula «ay de…». Son ocho lamentaciones, que Mateo coloca después de haber proclamado Jesús las Bienaventuranzas.
  • La vocación de Israel no era la de ser un pueblo que cumpliera hasta las más mínimas obligaciones rituales, sino un pueblo que hiciera posible otra forma de vivir la historia, haciendo presente a Dios, como su Señor y guía.
  • El reino de Dios ha sido anunciado por Juan Bautista y por Jesús. Los letrados usan de la autoridad de su en­señanza para impedir que el pueblo acepte ese mensaje, que ellos son los primeros en rechazar. Son los sabios y entendidos a que alude Jesús a quienes se oculta el designio de Dios. De ahí la responsabilidad que tenían por su saber de haber preparado el camino al reino, sin embargo son los que impiden que éste alcance sus objetivos.
  • Los judíos sabían perfectamente que la ley era una mediación para hacer posible la realización de la voluntad de Dios en este mundo. Pero, como  dice el refrán popular: hecha la ley, hecha la trampa. Jesús cuestiona profundamente la casuística pormenorizada y tramposa que inventa maneras «legales» de evadir la ley  y se vale de la  «letra sagrada » para conseguir sus propios fines.
  • Por eso Jesús vuelve a la intención original de la ley recordando que lo que santifica un objeto y hace obligatorio un deber no es la letra misma de la ley, sino el espíritu que la anima.
  • Jesús expresa, en forma de lamentaciones, su reprobación con respecto a la hipocresía de sus adversarios que actuando como guías del pueblo han cerrado a los hombres las puertas del Reino de los cielos, habiendo creado obstáculos a la acción de Dios en la historia. Siendo pésimos intérpretes de la Escritura; han sido malos pastores, han perdido la llave del Reino y siguen enseñando y deformando la Ley de Dios y las conciencias de los hombres.
  • Lamentablemente podemos constatar que  hay fariseos en todos los sectores de la vida humana y social, pero los de la religión son especialmente destructivos. Persiguen a las personas y los cazan para llevarlos a su propia convicción religiosa; no a la de Dios. Tienden a transformar a los otros en copias de sí mismos imponiéndoles con temor su propia semejanza de egoísmo y falsedad. A lo largo de toda la historia y aún hoy constatamos la presencia de este tipo de guías ciegos que nivelan y etiquetan a toda costa.
  • El anuncio del evangelio está muy lejos de toda homologación de la vida y de la conciencia. El Evangelio no oprime el corazón ni achata la vida, sino que es camino de libertad fecunda y creativa en el amor salvador de Cristo. Evangelizar no es hacer proselitismo ni encajar en un molde a todo hombre; muy por el contrario, es llegar hasta la raíz más profunda de cada hombre, a su realidad más íntima y personal iluminándola y haciéndola portadora de vida nueva.  

 

PARA DISCERNIR

  • ¿Manifiesto un espíritu farisaico en ciertas situaciones?
  • ¿En qué cosas exijo lo que no cumplo?
  • ¿Me aferro más a ley que al  espíritu?

 

REPITAMOS A LO LARGO DE ESTE DÍA

 

Cantemos un canto nuevo

 

ARZOBISPADO DE BUENOS AIRES

Vicaría de Pastoral