viernes, 30 de julio de 2010

«Sólo en su tierra y en su casa desprecian a un profeta»

¡Amor y paz!

El episodio de hoy concluye una sección del evangelio. Jesús abandona la enseñanza en las sinagogas y emprende su camino anunciando de pueblo en pueblo la Buena Nueva. El misterio de la "persona" del Señor se aclarará progresivamente, pero crecerá la incredulidad de las masas: ya no lo seguirán más que algunos de sus apóstoles. Incluso, es despreciado en su tierra.

Los invito, hermanos, a leer y meditar el Evangelio y el comentario, en este Viernes de la XVII Semana del Tiempo Ordinario.

Dios los bendiga…

Evangelio según San Mateo 13,54-58.

Y, al llegar a su pueblo, se puso a enseñar a la gente en la sinagoga, de tal manera que todos estaban maravillados. "¿De dónde le viene, decían, esta sabiduría y ese poder de hacer milagros? ¿No es este el hijo del carpintero? ¿Su madre no es la que llaman María? ¿Y no son hermanos suyos Santiago, José, Simón y Judas? ¿Y acaso no viven entre nosotros todas sus hermanas? ¿De dónde le vendrá todo esto?". Y Jesús era para ellos un motivo de tropiezo. Entonces les dijo: "Un profeta es despreciado solamente en su pueblo y en su familia". Y no hizo allí muchos milagros, a causa de la falta de fe de esa gente.

Comentario

a) En su pueblo, Nazaret, Jesús no tuvo mucho éxito.

Sus paisanos quedaron bloqueados por la pregunta: «¿De dónde saca éste esa sabiduría y esos milagros?». Fueron testigos de sus milagros, admiraron su sabiduría, pero no fueron capaces de dar el salto y aceptarlo como el enviado de Dios.

Un profeta no es recibido en su patria: «y desconfiaban de él».

Hay que reconocer que no les faltaba parte de razón a sus paisanos, al mostrarse reacios a ver en su vecino al Mestas y Salvador. Jesús es un maestro atípico, no ha estudiado en ninguna escuela famosa, es un obrero. Pero, con tantas pruebas, tenían que haber superado su desconfianza inicial.

b) Pasar de la incredulidad a la fe es un salto difícil. Se trata de un don de Dios y, a la vez,
de mantener una actitud honrada por parte de la persona.

En el mundo actual, como entre los contemporáneos de Jesús, existen muchos elementos que
condicionan a favor o en contra, la opción de fe de una persona. En Nazaret, el origen sencillo de Jesús (le esperaban más solemne y glorioso). Para los dirigentes del pueblo, la valentía y la exigencia del mensaje que predicaba. Unos le consideraban un fanático; otros, aliado con el demonio. Muchos no llegaron a creer en él: «vino a su casa y los suyos no le recibieron». Los que creyeron fueron los sencillos de corazón, a quienes Dios sí les reveló los misterios del Reino.

Seguro que conocemos personas que han quedado bloqueadas y no llegan a aceptar el don de la fe. ¿Les ayudamos? ¿Son convincentes o, al menos, estimulantes nuestra palabra y nuestro testimonio de vida, a fin de poderles ayudar en su decisión de fe?

J. ALDAZABAL
ENSÉÑAME TUS CAMINOS 5
Tiempo Ordinario. Semanas 10-21
Barcelona 1997. Págs. 211-215
www.mercaba.org