¡Amor y paz!
Los invito, hermanos, a leer y meditar el Evangelio, en
este lunes de la 1a semana del Tiempo Ordinario, ciclo A.
Dios nos bendice...
Lectio Divina: Marcos
1,14-20
Lectio
Lunes, 13 de enero de 2020
Tiempo
ordinario
1) Oración inicial
Muéstrate
propicio, Señor, a los deseos y plegarias de tu pueblo; danos luz para conocer
tu voluntad y la fuerza necesaria para cumplirla. Por nuestro Señor.
Amen.
2) Lectura
Del santo
Evangelio según Marcos 1,14-20
Después que Juan fue entregado, marchó Jesús a Galilea; y proclamaba la Buena Nueva de Dios: «El tiempo se ha cumplido y el Reino de Dios está cerca; convertíos y creed en la Buena Nueva.»
Bordeando el mar de Galilea, vio a Simón y Andrés, el hermano de Simón, largando las redes en el mar, pues eran pescadores. Jesús les dijo: «Venid conmigo, y os haré llegar a ser pescadores de hombres.» Al instante, dejando las redes, le siguieron.
Caminando un poco más adelante, vio a Santiago, el de Zebedeo, y a su hermano Juan; estaban también en la barca arreglando las redes; y al instante los llamó. Y ellos, dejando a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros, se fueron tras él.
3) Reflexión
• Después
de que tomaron preso a Juan, Jesús fue a la provincia de Galilea y empezó a
proclamar la Buena Nueva de Dios. Juan fue tomado preso por el rey Herodes
porque denunció el comportamiento inmoral del rey (Lc 3,18-20). ¡La prisión de
Juan Bautista no asustó a Jesús! Vio en ella una señal de la llegada del Reino.
Y hoy, ¿sabemos leer los hechos de la política y de la violencia urbana para
anunciar la Buena Nueva de Dios?
• Jesús proclamaba la Buena Nueva de Dios. La Buena Nueva de Dios no solamente porque viene de Dios, sino que también y sobre todo porque Dios es su contenido. Dios, El mismo, es la mayor Buena Nueva para la vida humana. Responde a la aspiración más profunda de nuestro corazón. En Jesús aparece lo que acontece cuando un ser humano deja que Dios entre y reine. Esta Buena Nueva del Reino de Dios anunciada por Jesús tiene cuatro aspectos:
a) ¡El
plazo está vencido! Para los demás judíos el plazo no estaba vencido todavía.
Faltaba mucho para la llegada del Reino. Para los fariseos, por ejemplo, el Reino
podía llegar sólo cuando fuera perfecta la observancia de la Ley. Jesús tiene
otro modo de leer los hechos. Dice que el plazo está vencido.
b) ¡El
Reino de Dios se ha acercado! Para los fariseos la llegada del Reino dependía
de sus esfuerzos. Llegaría sólo después que ellos hubiesen observado toda la
ley. Jesús dice lo contrario: ¡El Reino se ha acercado!” Ya estaba allí,
independientemente del esfuerzo hecho. Cuando Jesús dice: “¡El Reino se ha
acercado!”, no quiere decir que el Reino estaba llegando en ese momento, sino
que ya estaba allí. Aquello que todos esperaban, ya estaba presente en sus
vidas, y ellos no lo sabían, no lo percibían (cf. Lc 17,21). ¡Jesús lo
percibió! Pues él leía la realidad con una mirada diferente. Jesús revelará a
los pobres de su tierra esta presencia escondida del Reino en medio de la
gente. Es ésta la semilla del Reino que recibirá la lluvia de su palabra y el
calor de su amor.
c)
¡Conviértanse! El sentido exacto es mudar la forma de pensar y de vivir. Para
poder percibir la presencia del Reino en la vida, la persona tendrá que empezar
a pensar y a vivir de forma distinta. Tendrá que mudar de vida y encontrar otra
forma de convivencia. Tendrá que dejar de lado el legalismo de la enseñanza de
los fariseos y permitir que la nueva experiencia de Dios invada su vida y le dé
ojos nuevos para leer y entender los hechos.
d) ¡Crean
en la Buena Nueva! No era fácil aceptar este mensaje. No es fácil empezar a
pensar de forma distinta de todo lo que uno ha aprendido, desde pequeño. Esto sólo
es posible mediante un acto de fe. Cuando alguien viene a traer una noticia
diferente, difícil de ser aceptada, usted la aceptará sólo si la persona que
trae la noticia es de confianza. Y usted dirá a los demás: “Pueden ustedes
aceptar. Yo conozco a la persona. No engaña. ¡Es de confianza!” ¡Jesús es de
confianza!
• El
primer objetivo del anuncio de la Buena Nueva es formar comunidad. Jesús pasa,
mira y llama. Los cuatro primeros en ser llamados: Simón, Andrés, Juan y
Santiago, escuchan, lo dejan todo y siguen a Jesús para formar comunidad con
él. ¡Parece amor a primera vista! Según el relato de Marcos, todo aconteció
durante el primer encuentro con Jesús.
Comparando
con otros evangelios, la gente percibe que los cuatro ya conocían a Jesús (Jn
1,39; Lc 5,1-11). Ya tuvieron la oportunidad de convivir con él, de verle
cuando ayudaba a la gente y de escucharle en la sinagoga. Sabían como vivía y
lo que pensaba. El llamado no fue cosa de un momento, sino más bien de
repetidos llamados e invitaciones, de avances y retrocesos. ¡El llamado
comienza y vuelve a empezar siempre de nuevo! En la práctica, coincide con la
convivencia de los tres años con Jesús, desde el bautismo hasta el momento en
que Jesús fue levantado al cielo. (He 1,21-22). Entonces, ¿por qué Marco nos lo
presenta como un hecho repentino de amor a primera vista? Marcos piensa en el
ideal: el encuentro con Jesús tiene que producir un cambio radical en nuestra
vida.
4) Para la reflexión personal
• Un hecho
político, la prisión de Juan, llevó a Jesús a que iniciara el anuncio de la
Buena Nueva de Dios. Hoy, los hechos políticos y sociales ¿influyen en el
anuncio que hacemos de la Buena Nueva a la gente?
•
“¡Conviértanse! ¡Crean en la Buena Nueva!” ¿Cómo está aconteciendo esto en mi
vida?
5) Oración final
Porque tú
eres Señor,
Altísimo sobre toda la tierra,
por encima de todos los dioses. (Sal 97,9)
Altísimo sobre toda la tierra,
por encima de todos los dioses. (Sal 97,9)
Orden de
los Carmelitas