¡Amor y paz!
Los invito, hermanos, a leer y meditar el Evangelio, en este vieres en que
celebramos la fiesta de la conversión de san Pablo apóstol.
Dios nos bendice...
LECTIO DIVINA: CONVERSIÓN
DEL APÓSTOL SAN PABLO
Lectio:
Viernes, 25 enero, 2019
Tiempo ordinario
1) Oración inicial
Dios todopoderoso, que
gobiernas a un tiempo cielo y tierra, escucha paternalmente la oración de tu
pueblo, y haz que los días de nuestra vida se fundamenten en tu paz. Por
nuestro Señor. Amen.
2) Lectura
Del santo Evangelio según
Marcos 16,15-18
Y les dijo: «Id por todo
el mundo y proclamad la Buena Nueva a toda la creación. El que crea y sea
bautizado, se salvará; el que no crea, se condenará. Estos son los signos que
acompañarán a los que crean: en mi nombre expulsarán demonios, hablarán en
lenguas nuevas, agarrarán serpientes en sus manos y aunque beban veneno no les
hará daño; impondrán las manos sobre los enfermos y se pondrán bien.»
3) Reflexión
• Las señales que
acompañan el anuncio de la Buena Nueva. Al final Jesús aparece a los
once discípulos y los reprende por no haber creído en las personas que decían
haberle visto resucitado. De nuevo, Marcos se refiere a la resistencia de los
discípulos en creer en el testimonio de quienes experimentaron la resurrección
de Jesús. ¿Por qué será? Probablemente, para enseñar dos cosas. Primero,
que la fe en Jesús pasa por la fe en las personas que dan testimonio de
él. Segundo, que nadie debe desanimarse, cuando la falta de fe nace
en el corazón. ¡Hasta los once discípulos tuvieron dudas!
• Enseguida, Jesús les da
la misión de anunciar la Buena Nueva a toda criatura. La exigencia que plantea
es ésta: creer y ser bautizado. A los que tienen el valor de creer
en la Buena Nueva y que son bautizados, Jesús promete las siguientes señales:
echarán demonios, hablarán en nuevas lenguas, tomarán con sus manos serpientes
y si beben algún veneno no les hará daño. Esto acontece hasta el día de
hoy:
• echar
demonios: es combatir el poder del mal que daña la vida. La vida de
mucha gente mejora por el hecho de haber entrado en la comunidad y por haber
empezado a vivir la Buena Nueva de la presencia de Dios en su vida;
• hablar en nuevas
lenguas: es comenzar a comunicarse con los demás de una forma nueva. A
veces encontramos a una persona que nunca vimos antes y que nos parece hemos
conocido desde hace mucho tiempo. Es porque hablamos la misma lengua, la lengua
del amor;
• el veneno no
hace daño: hay mucha gente que envenena la convivencia. Mucho cotilleo
que estropea la relación entre las personas. Quien vive en presencia de Dios
sale adelante y consigue no ser molestado por este terrible veneno;
• curar a los
enfermos: en cualquier rincón del mundo, donde aparece una conciencia
más clara y más viva de la presencia de Dios, aparece también un cuidado
especial hacia las personas excluidas y marginadas, sobre todo hacia los
enfermos. Aquello que más favorece la curación es que la personas se siente
acogida y amada;
• a través de la
comunidad, Jesús continúa su misión. Jesús que vivió en Palestina y
que allí acogió a los pobres de su tiempo, revelando el amor del Padre, es el
mismo Jesús que continúa vivo en medio de nosotros, en nuestras comunidades. A
través de nosotros, continúa su misión para revelar la Buena Nueva del Amor de
Dios a los pobres. Hasta hoy, acontece la resurrección, que nos lleva a cantar:
"¿Quién nos separará, quién nos separará del amor de Cristo, quién nos
separará?" (cf. Rom 8,38-39). Ningún poder de este mundo es capaz de
neutralizar la fuerza que viene de la fe en la resurrección (Rom 8,35-39). Una
comunidad que quiere ser testigo de la Resurrección tiene que ser signo de
vida, tiene que luchar contra las fuerzas de la muerte, para que el mundo sea
un lugar favorable a la vida, tiene que creer que otro mundo es posible. Sobre todo,
aquí en América Latina, donde la vida de la gente corre peligro a causa del
sistema de muerte que nos fue impuesto, las comunidades deben ser una prueba
viva de la esperanza que vence el mundo, ¡sin miedo a ser feliz!
4) Para una reflexión
personal
• Echar demonios, hablar
en lenguas nuevas, vencer el veneno de las serpientes, imponer las manos a los
enfermos: ¿has realizado algunas de estas señales?
• A través de nosotros y de nuestra comunidad Jesús continúa su misión. En
nuestra comunidad ¿consigue realizar esta misión? ¿Cómo? ¿De qué manera?
5) Oración final
¡Alabad al Señor, todas
las naciones,
ensalzadlo, pueblos todos!
Pues sólido es su amor hacia nosotros,
la lealtad del Señor dura para siempre. (Sal 117,1-2)
ensalzadlo, pueblos todos!
Pues sólido es su amor hacia nosotros,
la lealtad del Señor dura para siempre. (Sal 117,1-2)
Orden de los Carmelitas